Una grulla voló entre mis sueños. Me contó de los cielos abiertos entre sus plumas.
Del aire que siente, como frío de libertad entre sus venas ardientes.
Tengo que buscar las tres compañías faltantes.
Yo soy la grulla.
Cada vez que me siento enterrada como recuerdo amargo,
como semilla apretada entre la tierra apelmazada... me recuerdo.
Volando libre como espada en el combate limpio.
Caminando serena entre la niebla.
Anidando entre enormes árboles de sabiduría.
Esta grulla soy yo,
entre hilos y plumas, me creo;
un universo de fortaleza y serenidad
que esta cada vez que creo en mí.
lunes, febrero 01, 2010
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