viernes, agosto 10, 2007

De la vida del objeto.



Transformación, diálogo y sentido.


…trueno y fragancia caen para que nazca de ellos la construcción, la forma, el edificio, de las manos del hombre. Te conozco, te amo, te vi nacer, madera.

Oda a la madera. Pablo Neruda.

Caminamos y a nuestro alrededor encontramos un sin fin de objetos que nos susurran al oído distintas historias. Algunos se empolvan y siguen siendo parte de nuestras vidas, otros yacen en la basura sin la mayor trascendencia que habernos servido un instante.

Encontramos en los mercados de antigüedades nuevas sugerencias semánticas para aquellos que fueron en su tiempo cosas comunes. Una botella de vino vacía, usada después como florero, una corcholata guardada en un cajón repleto de recuerdos de aquella época, un botón dentro de una alcancía. Siempre hay objetos en nuestra vida. El significado posterior al uso, hace que el objeto adquiera significado ya no sólo de icono, sino de símbolo, ha dejado de ser una mera representación para cobrar un sentido abstracto; la significación inicial, es sólo la presentación para obtenerlo.

Al principio, como todo ser vivo y creado para ser y estar, mantiene un fin implícito de lo que debe ser y hacer, de las tareas que debe cumplir, de los mensajes que debe comunicar, pero con el paso del tiempo adquiere carácter, ahora no sólo es una taza, no solo contiene al agua y promociona la marca tatuada al costado, ahora además de ser objeto de uso, también es un objeto que me habla, al que le he transferido un significado que va más allá del mero mensaje comercial. El discurso social del objeto se vuelve sentido particular que le atribuye el sujeto al objeto. Es más que mera mercancía nacida la producción masiva, me pertenece, y el sentido de pertenencia lo transforma y le asigna una vida diferente, ya no es como todos los demás; la diferencia lo rescata de la indiferencia.

Los objetos nacen, buscando su lugar en la vida de las personas, las ideas y su materialización son designadas bajo la sentencia primaria: ser para servir. Bajo el sentido de ser empleado, de ser instrumento, el objeto mantiene implícita la comunicación de mensajes tanto connotativos como denotativos, de esta forma nunca deja de servir y transmitir ideas, de mantener significación, de modo subjetivo u objetivo, pero siempre social.

Así también, como las artes se hicieron ver independientes y diferentes de las artesanías, lo hizo el diseño. A través de las diferentes épocas los objetos evolucionaron, y a raíz de la introducción de la producción en serie, éstos tomaron un nuevo perfil de uso (y desuso), el material se transformó, ya no sólo por las manos y las herramientas, sino también por las máquinas. Nació un nuevo parámetro de inventiva funcional y masiva, que nos habla a través nuevas formas del material, textura y color, para cubrir nuevas necesidades promoviendo la eficiencia: estandarización de las piezas, cuantificación del color para la reproducción, tipografías versátiles, materiales que disminuyan el costo y faciliten la producción, composiciones que atraigan la atención del mercado. Poco a poco a través de los objetos nacidos del diseño interpretamos la realidad de las diferentes culturas y los contextos en los que se desenvuelven. Comprendemos por medio de lo que nos comunican sus rasgos y características de producción, la situación económica, social y hasta antropológica.

Así, a los diseñadores se nos ha enseñado a crear en función de las necesidades del hombre (o del mercado), pero esto incluye cubrir aspiraciones para las cuales no siempre estamos preparados y buscamos el modo en que la transformación surja como maravilla creadora de nuevas alternativas para el mejoramiento. Nos apasiona la observación, la sensación de una forma que nació con la noble tarea de servir. El fin es ayudar por medio de la utilización de los recursos creativos (en todos sentidos) al desempeño de tareas del hombre, nos valemos de la inventiva, de la evaluación, de la tecnología, para tratar de cumplir con una idea denominada funcional. Aunque algunas veces esto no se cumpla del todo, se considera un verbo relevante en la praxis de nuestra interdisciplina , y muchas veces es la meta más importante, el sentido que muchos quisiéramos lograr, poder aportar mejoras ya sea a través de la ergonomía correctiva, del rediseño de la silla de ruedas, de la nueva prótesis, del empaque que logre transportar y proteger a otro objeto.

El diseño comenzó a diferenciarse de sus antecesores estéticos y culturales. No es arte, sin embargo emplea a la estética, la proyectación de conceptos y la abstracción de ideas y formas; no es artesanía, pero moldea a los materiales y hace uso de la sensibilidad y técnica para que éstos puedan transformarse en objetos útiles en la vida cotidiana de las personas.

Al crear pensamos que es fácil poder diferenciar una técnica de una disciplina, por que comparamos cualidades y características. Pero a pesar de nuestra necesidad de definición y diferenciación, existe al igual que en cualquier tipo de tejido, la unión de tramas y urdimbres que forman y dan sentido. Al ver superficialmente creemos que es un solo cuerpo, y afirmamos con seguridad, que es uno solo, pero la profundidad en la observación, nos lleva a entender que sin embargo, ese cuerpo tiene mucha más complejidad de la que creímos, que no es completamente independiente. La complejidad en un objeto, es la conjunción de otros varios elementos y características que lo determinan y que al mismo tiempo lo enfrentarán y definirán frente al mundo; así como existe siempre entre todas las formas de vida una simbiosis, interacción y retroalimentación, los objetos forman parte de nuestro entorno al que gradual y constantemente ayudan a determinar y es también por medio de ellos que manifestamos nuestras preferencias y afinidades por medio de la sensibilización, es esta la parte en la que, durante el proceso de creación y proyectación de ideas, podemos transferir o pulir la vida contenida, ésa, a la que no estamos acostumbrados a diferenciar fácilmente, por que requiere más que simple observación y técnica, análisis e integración del todo con el todo, comprensión de los conceptos abstractos de crear y diseñar, designar más que sólo dibujar.

Describe Neruda el nacimiento de la madera, parida por el rugir del árbol, casi como grito escuchado por su padre el bosque y que al cambiar su forma por la mano del hombre, termina dándole asilo y refugio. He escuchado también del barro transformado, que adquirió forma y sentido diverso a su vida, teniendo la capacidad de transmutar, de jarro a maceta y luego volver al polvo del que venía. Será por que el objeto no solo es cosa, sino significado contenido en el cuerpo, moldeado en la forma del pensamiento de quien lo crea. El sentido de creación no sólo se remite a la eficaz producción, sino a la proyectación de ideas, es cierto que lo que se crea nace de una idea y un pensamiento, pero también es verdad que las ideas portan deseos, aspiraciones, e incluso ambiciones. Cada objeto refleja además de necesidades, cualidades que lo hacen ser o no del agrado de los demás, y cuando ha pasado la etapa de elección entre muchos tantos, comienza su crecimiento, relación y desarrollo de sentido.

Crear involucra a la integración. Eso significa que el objeto no es solo el resultado del cálculo de densidades de materia y resistencia, proporción, escala y función determinada y específica. El objeto también se involucra con la poesía que dialoga a través de la forma, de la textura, del color, del volumen. Como en la música,con la armonía de las notas, la composición no es receta para mezclar, no es método para el cambio físico, es transformación nacida del entendimiento de la naturaleza en relación entre elemento, materia y forma.

“Crear objetos con las manos significa mucho para mi… Ciertas actividades…me inspiran al grado de resultar una tentación para hacer nuevos experimentos. Disfruto tanto extraer el movimiento y el ritmo de las vetas de la madera… me transportan a aquel mundo en el que, aunque me fallara la mirada podría sentir las formas geométricas y el movimiento constante en las puntas de mis dedos…”

Tapio Wirkkala se refiere al uso de los sentidos para la transformación, y es por que a través de ellos podemos establecer comunicación con el material. Así mismo, al transformarse en objeto, éste se comunica. Wirkkala posee la particularidad de ir de la tarea de diseño, a la de artesano, y sus piezas sin embrago, son admiradas casi como creaciones de obras de arte. Esto es gracias a que entiende al objeto como creado a partir de su naturaleza individual y puede llegar a una convivencia en su visión de creador, lo suficientemente amplia para comprender que el sentido radica en el lenguaje, en la forma en la que se transmiten mensajes íntimamente ligados no sólo con la finalidad, sino con el sentido.

Bajo el mismo esquema de diálogo entre los componentes que forman al objeto, éste se relaciona con el medio. Así como la forma le ha dado voz, él articulará nuevos mensajes y podrá mantenerse relacionado, aunque cambien los modos de observarlo y entenderlo. Un objeto que fue elaborado para cubrir necesidades aparentes, tendrá una vida corta, por que en la calidad del sentido de su creación radica su longevidad.

Una enorme escultura nos habla, tal vez no con el mismo idioma, pero igualmente, como lo hace un rebozo, o un objeto cotidiano como una cubeta, observamos dentro de ellos la expresión del macro y el micro. De algún modo, no es necesario saber el idioma para comprender lo que nos quieren comunicar. No hay que ser expertos, hay que ser concientes de los mensajes que observamos, que escuchamos, que sentimos.

Desgraciadamente nuestra realidad vive demasiado aprisa para detenerse a escuchar, observar y reconocer. La imagen se ha vuelto más importante que el sentido. Para todos aquellos capaces de adquirir productos innovadores la relevancia es estar siempre dentro de la actualidad. Para aquellos que no pueden asumirse dentro de los estratos elevados de adquisición, sus objetos tendrán que cubrir varias funciones y por supuesto adquirirán varias significaciones. El interés del diseño en el desarrollo de los objetos para estas personas radica en que si bien, no tienen tanto respaldo económico, tienen el respaldo de una mayor cifra en población, al igual que una cantidad mayor de necesidades. De ahí la relevancia de profundizar en el sentido de la creación de los objetos y mensajes. De la importancia del sentido creador, de la complejidad de las relaciones de sentido, conciencia y responsabilidad en el diseño. De la importancia del objeto en lo cotidiano y de su vida a partir de la relación con la gente.

Los aparatos portátiles de música, los envases de detergentes, huacales, botellas de agua, calzado deportivo, todos son objetos diseñados y se asocian de maneras diferentes con las personas. Unos más comunes que otros, más o menos empleados, costosos, baratos, de calidad o no, todos se relacionan con la gente que los emplea y dejan claro por su uso y procedencia su nivel de relación.

Si seguimos mirando siempre encontraremos restos de las historias contenidas en los objetos, en el futuro serán ellos quienes cuenten la nuestra, como fósiles de la cultura que hemos creado, ahogados en los ríos y los mares, enterrados por la tierra, queriendo cubrir nuestra falta de entendimiento de su vida y la nuestra, y entonces nos preguntaremos que fue lo que hicimos.

Por eso creo q en los objetos sencillos radican las tareas creativas más complejas y en los más complejos la ambición de encontrar la perfección perdida en la funcionalidad extrema:

La función del objeto es hacernos saber lo que deseamos de nosotros mismos. Como el oxigeno convertido en humo, hemos producido tantos objetos sin vida, hay tantos cuerpos de ellos olvidados y la gente que tampoco ha sido dueña de su propia creación, hace amistad con ellos, y así se devuelven el significado, con un sentido común, establecen un diálogo para tener sentido en su existencia.

Observando siempre encontraremos restos de las historias contenidas en los objetos, en el futuro serán ellos quienes cuenten la nuestra, como fósiles de la cultura que hemos creado, ahogados en los ríos y los mares, enterrados por la tierra, queriendo cubrir nuestra falta de entendimiento de su vida y la nuestra, y entonces nos preguntaremos que fue lo que hicimos.

El significado de querer perfeccionarnos a nosotros mismos, que nos reflejamos en esos objetos. Después de todo, en ellos jamás encontraremos los significados profundos de crear, ni las respuestas a las preguntas sencillas de quienes somos. Sintiendo en el interior la virtud creativa deberíamos comprender su magnitud. FHJ.



miércoles, agosto 08, 2007

El día para poner en práctica


Después de haber tomado un curso de más de seis meses de budismo tibetano, uno se queda pensando en que tan viable es la aplicación de todo este conocimiento, es decir, uno sabe que pasan cosas extrañas en esta vida y que no se puede hacer otra cosa (a veces) más que permanecer de espectador - y vaya que cuesta trabajo cuando uno siente aplicado el rigor burocrático y el peso completo de la real impotencia- dejar que las cosas fluyan por su orden natural y comprender plenamente que todas las cosas tienen un por que para que sucedan. Si... hoy fue un buen día para poner la teoría en práctica (seguro me habrían dado una constancia a la buena paciencia) jajajajaja me quedo sin título y cédula un día más y tal vez sin la posibilidad de solicitar la beca de CONACyT, en fin... si por algo pasan las cosas y el karma realmente existe, jajajajaja espero que el día de hoy no se transporten pesados pianos y yunques por el edificio de profesiones, sino seguro que hoy alguien tendría un recordatorio de la calidad de coincidencias fatales marca ACME... jajajaja Saludos a todos los encargados de trámites!! y salud! que hoy permanezco de espectadora.